Orígenes y sedes
Orígenes y comienzos
El origen de la Venerable, Piadosa y Real Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santísima Virgen de la Estrella, Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo y Ntra. Señora de los Dolores se remonta a finales del siglo XVI , ya a principios del XVII , durante el reinado de Felipe III. Ubrique en aquellos años se dedicaba a la agricultura y ganadería principalmente.
Según se cuenta en los documentos que poseemos, en el año final del siglo XVI hubo por esta parte de la sierra de Cádiz una epidemia de peste muy importante. La gente del pueblo se encomendó a Dios y la epidemia empezó a remitir, y la gente del pueblo en agradecimiento deciden edificar una ermita en honor a San Sebastián a quien le atribuyen el milagro.
En la Hermandad poseemos la correspondencia que cruzó con el Obispado de Málaga la comisión o grupo de gente encargados de recoger los donativos para la construcción de la ermita.
La primera carta que se envía, la firma en nombre de los vecinos Juan de Soto, pidiendo licencia al Obispo para la edificación de la ermita y para pedir limosna en los días de fiesta en la iglesia para tal fin, esta carta se envía en septiembre de 1600. A primeros de Noviembre de ese año el Obispo de Málaga D. Tomas de Borja, hermano del Santo San Francisco de Borja, envía una carta en la que encarga al cura y beneficiado eclesiástico de la villa que vean ellos el lugar mas conveniente para la construcción. Rápidamente se contesta el decreto del obispo, nombrando el beneficiado D. Juan Benítez Maldonado y el cura Escalante de Cuella, a D. Juan de Soto como depositario de las mandas y limosnas y señalan como lugar mas adecuado el nacimiento del Garrobal: “NOMBRAMOS Y SEÑALAMOS POR SITIO MAS COMODO EL NACIMIENTO DEL GARROBAL PORQUE ES CERCA DEL LUGAR Y DONDE TODOS LOS VECINOS PUEDEN ACUDIR CON FACILIDAD Y POR SER SITIO CLARO Y APACIBLE”.
Y por fin el día 14 de octubre de 1601 se da licencia para dar misa en ella, mediante escritura del Sr. Obispo D. Tomas de Borja firmado y sellado. Así se puede decir que la Hermandad, que en principio era de Gloria, comienza su andadura, incorporándose luego las Imágenes de Ntro. Padre Jesús Nazareno, Dulce Nombre de Jesús y Virgen de los Dolores, pasando a ser también Hermandad de Pasión.
No sabemos que Imagen se incorpora antes, pues en unas actas la Hermandad se denomina como del Dulce Nombre y Mártir San Sebastián y en otras como de Jesús Nazareno y Mártir San Sebastián. (Desde 1605 hasta 1749 no se conservan más documentos).
De las imágenes de San Sebastián, del Nazareno y Virgen de los Dolores no sabemos mucho pues desaparecen en abril de 1936 en la quema de imágenes en la Parroquia, donde se encontraban por estar en ruina la Ermita. Sabemos que la imagen de Padre Jesús era una talla de vestir, solo con cabeza y manos, de igual tamaño que la actual, con pelo natural e iba acompañado de un Cirineo.
Conservamos algunos enseres de la antigua imagen como son la túnica de color burdeos bordada en oro del siglo XVIII con la que procesiona actualmente, las potencias del siglo XVII, corona y cordón, gracias a que el anterior mayordomo las tenía guardadas en su casa y al reorganizarse la hermandad en 1940 las donó a la nueva imagen.
La antigua Imagen de Ntra. Señora de los Dolores es una obra anónima del siglo XVIII, de vestir y sólo con busto y manos. En la hermandad tenemos un manto de esta Virgen de terciopelo negro bordado en oro del siglo XVIII, obra de D. Bartolomé Romero Gómez que costo 1.200 reales. Con este manto la Virgen de la Estrella ha salido en procesión desde la primera vez en 1963 hasta el año 1990. Tenemos también algunas prendas más, que han sido custodiadas por la familia del ultimo mayordomo que tuvo la Virgen de los Dolores, encargado del ajuar, como son la peana de plata, un manto y saya de terciopelo negro bordado en plata, toca y pañuelo bordado en oro. Este ajuar de la Virgen, incluido el trono y varales de plata fueron cedidos mediante escritura notarial por una señora de Jerez, Dª Beatriz Carrasco, muy devota de esa imagen para su uso, pero con una cláusula: que si la familia de ella los reclamaba había que devolverlos.
La Imagen del Dulce Nombre de Jesús también ha sobrevivido a la historia gracias a que estaba en una casa particular, que hemos sabido después que era la casa de su camarera Dª Isabel Pérez desde el año 1933 en que se declaró en ruina la Iglesia de San Sebastián y se libró de las llamas. Es una talla de cuerpo entero de estilo barroco de la escuela sevillana del siglo XVII, tiene varias túnicas bordadas en oro también de esa época. Esta imagen solía salir en procesión el día 1 de enero y la portaba mujeres desde la parroquia hasta la Ermita. También llegó a salir en la década de los años 70 el Domingo de Ramos.
Junto a la Hermandad del Nazareno existían otras dos mas: la de la Santa Vera Cruz con sede canónica en la Iglesia de San Juan de Letrán, actualmente en ruinas, y la del Santo Entierro con sede canónica en la Parroquia. La del Nazareno sería la mas importante, ya en 1790 tenia 250 hermanos. Esta Hermandad la formaban principalmente agricultores, que tenían la obligación de dar limosna de verano en trigo, que luego la Hermandad lo vendía cuando mas convenía. También se daba la cuota en Semana Santa y el día del Dulce Nombre. Al estar compuesta la Hermandad por muchos agricultores y ganaderos, estos tenían en la Ermita a su patrón San Isidro. En los libros queda reflejado como en 1816 se le encarga un retablo para San Isidro a D. Juan de los Reyes por 200 Reales.
La Hermandad también tenía terrenos anexos a la Ermita donde sembraban chopos para su posterior venta, y en el cementerio que estaba junto a la Ermita tenía la Hermandad unas bóvedas propias para los hermanos que se quisieran enterrar en ellas. En la Hermandad los cargos se elegían por un año en uno de los dos cabildos que se celebraban. Estos cabildos se anunciaban con tres toques de campana, y solía haber uno para preparar la Semana Santa y el día del Dulce Nombre, otro para elegir cargos y otro para dar las cuentas anuales. Estas cuentas eran firmadas por un notario, y cada varios años pasaba por Ubrique un enviado del Obispo en Santa Visita para verlas y refrendarlas.
La Hermandad celebraba el 1 de enero, Festividad de la Circuncisión del Señor, la procesión del Dulce Nombre de Jesús y San Sebastián. La Imagen del Dulce Nombre de Jesús era llevada por mujeres, desde la Parroquia hasta la Ermita y se pagaba por llevar el paso y por llevar las insignias. En Semana Santa la procesión salía el Viernes Santo por la Mañana y se daba un sermón para lo que se traía un predicador.
La Pascua de Resurrección desde 1776 empezó a celebrarse conjuntamente en las tres hermandades para dar mas solemnidad al acto. Este acto se celebraba en la Parroquia y la Hermandad de Ntro. Padre Jesús Nazareno iba en procesión corporativa desde la Ermita con su guión y los cirios. También se celebraba en la octava del Corpus en mayo el Día de la Cruz con fuegos.
La Hermandad tiene un gran auge desde mediados del siglo XVII hasta la primera parte del siglo XIX, pues se agranda la Ermita, construyéndose una nave anexa y construyendo un camarín para la Virgen de los Dolores. También recibe generosas donaciones, donativos en especies y en dinero, herencias también en dinero e inmuebles como son una casa en la calle Perdón vendida en 1801 y otra en la calle Toledo, esquina con la calle Remedios o Cantarranas, que estaba alquilada como se ve en los libros de cuentas pero no consta que se vendiera. De estos donativos poseemos los testamentos hechos por los titulares ante notario.
La Hermandad también posee una Bula del Papa León XII del año 1829, y una Bula del Papa Paulo V de 1605 que estaba custodiada en una casa particular pero actualmente está recuperada y en poder de la Hermandad. A través de las actas vemos que también hubo tiempos de crisis en la localidad a mediados del Siglo XIX, por lo que no se cobró cuota alguna ni limosna por la hambruna y calamidad que había en el pueblo. También podemos ver que comienzan los trabajos de curtición de cuero en el último tercio del siglo XIX pues hay muchos donativos de cuero para su posterior venta, ya que antes no había donativos de este tipo.
La Ermita siempre ha estado en reformas por el lugar donde se ubica y en 1849 se reconstruye de nuevo colaborando todo el pueblo según se puede observar en el listado que tiene la Hermandad en propiedad. Después se reconstruye otra vez en 1950 por haberse declarado nuevamente en ruina. Desde 1880 no se poseen más documentos hasta 1940, año en que se refunda de nuevo, con las nuevas imágenes.